Protocolos y manuales

Prioridades de inversión y atención

Las buenas practicas se han focalizado en la provisión de vivienda de emergencia, adecuación de vivienda temporal y suspensión de desalojos. El impacto de la pandemia se sufre de manera desproporcionada en las áreas donde existe precariedad en las condiciones habitacionales como en los asentamientos informales.

Vivienda de emergencia para una cuarentena segura para población habitante de calle y refugiados
Atención integral y Suspensión de Desalojos
Moratorias en hipotecas privadas y renta en vivienda pública

Las buenas practicas se focalizan en acciones coordinadas de respuesta diferencial para prevenir la mortalidad en asentamientos informales deben encuadrarse como un peldaño clave del mejoramiento integral de barrios para una efectiva recuperación pos-pandemia.

Instalación y construcción de puntos de higiene y salud temporal en el espacio público
Garantizar el mínimo vital de consumo de agua a hogares conectados al sistema
Reconexión a los servicios públicos domiciliarios de hogares morosos

Gobernabilidad y alianzas intersectoriales

Las buenas prácticas ponen en marcha alianzas multi-sectoriales para proteger la vida de la población mas vulnerable y encuentra mecanismos novedosos para involucrar a la población civil en el proceso.

Alianzas con el sector privado para movilizar inmuebles vacantes
Alianzas con las iniciativas de planeación comunitaria para coordinar respuesta a la emergencia
Alianzas publicas multi-nivel de atención solidaria
Alianzas de sociedad civil y gobiernos locales

Sustento y economía local

Las buenas practicas operan en proteger a los trabajadores esenciales que están mas expuestos a la pandemia, cubrir las necesidades básicas alimentarias de hogares en riesgo de malnutrición y evitar el colapso económico de las unidades productivas pequeñas en los territorios vulnerables.

Transferencias monetarias de renta básica
Seguridad alimentaria y acercar comercios a los hogares de los vecinos
Apoyo a las unidades productivas locales

Sistema de cuidados

Las buenas prácticas se focalizan en recuperar y fortalecer los servicios públicos comunitarios y minimizar la circulación de vecinos para acercarse en búsqueda de servicios sociales, así como también el apoyo psicosocial de los impactos mentales, emocionales y los riesgos de violencia de genero.

Acceso remoto a los servicios de salud
Servicios estatales descentralizados en los barrios
Atención psico-social en línea
Movilidad segura para trabajadores de la salud
Conectividad segura en el espacio publico y cierre de la brecha digital
Entregar dispositivos de internet móvil para mejorar la conectividad digital de los hogares
Fortalecimiento de actividades educativas para estudiantes rezagados

Datos espaciales y conocimientos territoriales

Las buenas prácticas operan tanto en la pedagogía publica para generar una información clara y desmentir rumores, así como también reconocen prácticas y conocimientos de las condiciones territoriales de las comunidades.

Plataformas oficiales de información pública
Mapeo comunitario de áreas informales
Iniciativas ciudadanas de Fact Cheking
Análisis de datos abiertos con la ciudadanía sobre movilidad

Estrategia regional de recuperación

Las buenas prácticas operaran articulando una recuperación verde que cambie el paradigma de la industria de la construcción hacia la justicia climática y la transición energetica y que a su vez encuadre la vivienda como parte de la infraestructura del cuidado.

Gobernanza urbana mejorada para la equidad territorial
Mecanismos y mercados financieros más justos para el acceso a la tierra y la vivienda y a servicios básicos
Mejores condiciones de vida para los migrantes, las personas en viviendas temporales y la prevención de desalojos
Mejora de la resiliencia urbana y la salud física y mental a través de la vivienda
Viviendas más eficientes en el consumo de energía, bajas en carbono, innovadoras y sostenibles